A medida que la emergencia nacional frente al COVID-19 se desarrolla, somos muchas las organizaciones que nos sumamos a la causa de quedarnos en casa y cumplir con el tele-trabajo. ¿Teletrabajo? Desafío para muchos: 7 tips para manejarlo efectivamente. 

Podemos seguir tele-trabajando, pero la realidad es que la economía se detiene, las ventas se aplazan, las ciudades se congelan. Y no solo eso, nuestra economía venía saliendo de la desaceleración, con cifras de pequeñas recuperaciones y un ritmo de crecimiento un tanto mejor. Pero volvemos a ver una tendencia a la baja.

¿A cuál industria pertenece su empresa? Posiblemente se ha disminuido la producción por la interrupción de flujos comerciales, provocando un shock de oferta. Pero por otro lado, podemos ver también vemos un shock en la demanda, que se desvía hacia otro tipo de bienes, por lo que salir a comer a un restaurante o ir al cine pasa a un tercer plano. 

En toda crisis siempre hay ganadores y perdedores, aunque estos ganadores no tienen mucho que celebrar, porque se trata de una emergencia nacional. Por ejemplo, si su negocio es vender artículos de limpieza, versus la hotelería, la crisis nacional tendrá distintas afectaciones en su crecimiento y la sostenibilidad de sus operaciones.

Mientras tanto, los que nos sumamos al tele-trabajo nos enfrentamos además a la nueva experiencia de trabajar desde la casa.

A pesar de que es una modalidad creciente entre las nuevas generaciones laborales, para otros, es una ruptura en la rutina que repercute a nivel de productividad. Por eso, le sugerimos tomarse un poco de tiempo y analizar cuál va a ser la mejor forma de sacarle provecho a esas horas desde la casa:

 

1. Conozca su estilo de trabajo. Se desempeña mejor durante la mañana o la tarde? En silencio o con música? Póngase cómodo.

2. Diseñe el mejor espacio de trabajo que pueda en su hogar. Considere la luz, la silla, la calidad de internet, las distracciones, etcétera.

3. Mentalícese para trabajar. No se trata solo de abrir su laptop. Busque el cambio mental de todos los días que inicia su enfoque y productividad. La ropa que lleva puesta, créalo o no, influye en su arranque.

4. Prográmese con tareas, reuniones, actividades y demás de la manera más creativa y dinámica. Hágalo anticipadamente para toda la semana, así no tendrá tiempo para perder divagando.

5. Cuide su estado anímico y físico. Estar en casa puede sonar a vacaciones, pero el encierro y aislamiento también podría afectar su ánimo y su condición. Anímese a agendar por Skype o Zoom, por ejemplo, y levántese cada hora para estirar sus piernas y espalda.

6. No olvide la hora de almuerzo, que puede convertirse en el evento que divide su mañana de su tarde para darle un nuevo aire a su jornada vespertina.

7. Cumpla con sus horarios, empiece puntual y termine su día como cualquier otro, apagando su computadora hasta el día siguiente. No lleve su trabajo al dormitorio, recuerde que el descanso y la recreación (desde casa) son igual de importantes para su organización.

Recuerde, los cambios siempre traen algo positivo.Tal vez, a raíz de estos cambios mundiales, su carga de trabajo ha disminuido y tiene más tiempo disponible. Es momento de refrescar su rutina, ponerse creativo e innovar. Proponga, impulse, capacítese, muévase y provoque la impresión en sus colaboradores y supervisores que lo escalen a nivel profesional. 

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